FARMACOLOGÍA
en la Kinesiología
Farmacología
La farmacología es la ciencia que trata el mecanismo de acción, usos y efectos adversos de los fármacos, sea que ésas tengan efectos beneficiosos o bien tóxicos. Tiene aplicaciones clínicas cuando las sustancias son utilizadas en el diagnóstico, prevención, tratamiento y alivio de síntomas de una enfermedad.
Inicios de la Farmacología
Las civilizaciones antiguas recurrían a una mezcla de magia, religión y medicinas para tratar las enfermedades y a los fármacos se les solía atribuir una naturaleza mágica.
La mayoría de las medicinas de la antigüedad procedían de plantas y de partes o líquidos de origen animal. Por ejemplo, los egipcios utilizaban las bayas de opio.
Las tradiciones de los fármacos fueron desarrolladas por los árabes desde el año 700 al 1000 d.c aproximadamente, quienes fundaron boticas y hospitales.
El proceso de la farmacología dependía de la comprensión creciente de la fisiología humana, la fisiopatología y el conocimiento de los fármacos aumentó a la vez que el de las funciones del cuerpo (anatomía, fisiología y bioquímica) y de la química.
Generalmente se considera que el patriarca de la farmacología es Paracelso. El creía que cada fármaco (o planta) debía utilizarse solo. “… la misión de la química es producir medicinas para tratar las enfermedades, puesto que, las funciones esenciales de la vida son fundamentalmente de naturaleza química… todas las cosas son venenosas porque no existe nada sin cualidades venenosas. Solo la dosis es lo que convierte una cosa en veneno…”. Estas palabras aun son parte del pensamiento farmacológico.
Paracelso
Objetivos de la Farmacología
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Obtener información sobre las acciones de los fármacos en el ser humano, mediante la investigación clínica, ensayos clínicos y estudios de farmacocinética clínica.
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Recopilar, evaluar de forma crítica y sistematizar la información sobre la utilización más adecuada de los medicamentos y difundir esta información.
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Aplicar estos conocimientos para mejorar la utilización de los medicamentos en la práctica clínica mediante el establecimiento de una política de utilización de los medicamentos, consultas terapéuticas, monitorización de niveles séricos de fármacos, control de cumplimiento y desarrollo de programas de fármaco vigilancia.
Fármaco v/s Medicamento
El fármaco es el principio activo del medicamento, capaz de producir en la célula un cambio para bien, mientras que el medicamento es el conjunto de elementos extra de un fármaco, como son los excipientes para mejorar la absorción del fármaco, proteger de la acidez estomacal, penetrar en la célula y ayudar al fármaco a cumplir su efecto terapéutico sobre la célula.
Compuesto activo y Excipiente
El concepto de principio activo se emplea en el ámbito de la química para nombrar al componente que porta las cualidades farmacológicas presentes en una sustancia. Esto quiere decir que el principio activo de un fármaco es aquel que permite prevenir, tratar o curar una enfermedad u otro tipo de trastorno de salud.
Los excipientes son los componentes del medicamento diferentes del principio activo. Estos se utilizan para conseguir la forma farmacéutica deseada (Cápsulas, comprimidos, soluciones, etc) y facilitan la preparación, conservación y administración de los medicamentos. Es el único componente que puede diferir cuando compramos un medicamento genérico y su equivalente de marca.